Quince de febrero y otras cosas

#np Coming down - FFDP.

Nos pasamos la mayoría del tiempo diciendo que estamos solos, o más bien pensándolo, aunque en realidad sabemos que no es así, cuando decimos que estamos solos más bien nos referimos a que nos falta alguien, tal vez un familiar cercano, un amigo o simplemente alguien que pensábamos que nunca se iría y nos volcamos tanto en él que ahora que no está nos sentimos solos. Esa es la soledad a la que siempre nos referimos, y no a la soledad de no tener a nadie... 


De pequeñas jugábamos con muñecas y nos peleábamos por quién se quedaba con el chico, se lo decíamos a nuestras madres pero luego nos daban chuches y se nos pasaba porque acabábamos compartiéndolas. Nos metíamos en su habitación o en la mía y nos tirábamos horas y horas sin oir a nadie más que a nuestros juguetes hablando entre sí. Con la edad eso fue cambiando, pasamos de primaria a la ESO, pero algunas cosas seguían igual, seguíamos tirándonos horas y horas la una en la habitación de la otra, pero ya no hablaban nuestras muñecas sino nosotras mismas, quejándonos de que nos gustaba un chico que se mandaba notitas con otra y contándonos lo que nos gustaría hacer en el futuro juntas. Una de las cosas que más envidio de esas épocas era lo fácil que era estar bien, por mucho que te pasase era tan sencillo como poner música en la radio y saltar como locas, bailando, riéndonos, y olvidando todo lo que pasaba fuera de casa. Y claro, nos seguimos haciendo mayores, pasamos de la ESO a bachillerato, y nuestros caminos se separaron. Nuestros carácteres siempre habian chocado a veces más a veces menos, pero eso es lo que hacía que nuestra amistad hubiese durado desde pequeñas, porque no era amistad, eran continuas peleas y perdones de dos hermanas que siempre estaban la una para la otra. Envidio esos tiempos, porque ahora que tengo problemas más allá de un 8 en mates o un parte leve, y ahora con poner música y bailar no soluciono nada, además ahora ella está en su habitación y yo en la mía, y no tengo a quien ensuciarle el suelo de coca-cola.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Oda a las ganas

Cortocircuito

El duelo sin fin