Dolores

El dolor que hoy acoge mi corazón trata de lo siguiente, una pérdida, soledad, vacío, penumbra y tristeza. Hoy llueve en mi corazón, y mis ojos le acompañan. Cada brisa de aire hoy es una puñalada para un cuerpo que yace destrozado sobre una cama inundada con mentiras y charcos de lágrimas. Mi pena es mi mayor castigo, el cual yo alimento y no sé como dejar de hacerlo. Me escondo bajo la manta y me prometo que no va a ser para siempre, que algún día algo irá bien y podré retomar lo que un día llamé vida y hoy me destroza las entrañas como si fuese una muñeca de trapo. Tantas veces pregunto al aire que si queda mucho que ya cuando me contesta ni lo oigo. Todo castigo termina, más no dejaré que mi pena se convierta en mi cárcel si aún puedo encontrar la salida y guardarla por si algún dia consigo levantarme.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Oda a las ganas

En el umbral

Cortocircuito